35 años sin Luca Prodan: el fuck you permanente

Luca Prodan hizo estallar en pedazos, desde su océano, la tradición rockera nacional. Cantaba en inglés, era pelado y arrancó con una chica británica como baterista.

A 35 años de su muerte, su historia -atravesada por los tectónicos movimientos en Europa de las dos guerras y sus ondas políticas, sociales y culturales- es una biografía, por tanto, donde se borran fronteras, es la construcción permanente de un lugar desde el no lugar. Ese concepto, ese no lugar, le permitirá a Luca romper con las tradiciones sonoras utilizando todas ellas a la vez para finalmente constituir una nueva y potente, al inventar esa vanguardista máquina de after punk, dark rock y reggae que pasó a la historia como Sumo.

Verte feliz es todo, Messi, y es este un rock and roll del país

Esa felicidad de Messi es, precisamente, la traducción de un pueblo que necesitaba esa felicidad. O, mejor dicho, ambos se necesitaban mutuamente. Sí, ambos se necesitaban, como esas miradas que duran lo que dura una órbita en el cielo. Lo que dura un beso esperado. Es que Messi tiene el oficio de la felicidad con una pelota y la felicidad, como el dolor, se hace de a dos, de a muchos, de a todos, de a años.

Lionel Messi y su derecho a la vulgaridad

Está bien su derecho a decir lo que se le cante en medio de un partido que tuvo la elegancia de un potrero. Que pueda decir que se vayan a la mierda van Gaal y sus bravuconadas (anoten las docentes, en la “R”). Y sí, fue un partido con bravuconadas y ese también fue un terreno de disputa. El reino de la necesidad, dijo un poeta, no conoce moral.